Película "Desde el Jardín", la Simplicidad de la Vida
Análisis de "Desde el Jardín" (Being There): Exploración de la Adaptación Cinematográfica, Personajes y Metáforas en el Cine de los 70
Por Andrea Rosales
"Desde el Jardín" es una película del libro homónimo de Jerzy Kosinski, se estrenó en el año 1979, fue protagonizada por Peter Sellers y dirigida por Hal Ashby -ganador de un Óscar en el año 1967-.
Being There es su título en inglés. En España se la conoce como Chance. Narra la vida de Chance Gardiner, un personaje sin identidad, posiblemente una persona autista que vive en una casa junto a un viejo millonario y su cuidadora.
Tras la muerte del viejo, que no es su padre pero lo crió desde muy pequeño, Chance se ve obligado a abandonar la casa donde vivió toda su vida porque entra proceso de sucesión.
No tiene un rumbo, nunca ha salido al exterior, su vida se ha limitado a la hogar donde se desempeñaba como jardinero; la televisión era su única conexión con el mundo exterior.
Fuera de la casa, un ligero accidente lo lleva a cruzarse con Eve Rand (interpretado por Shirley MacLaine), esposa del multimillonario Ben Rand (Melvyn Douglas) quien padece una enfermedad terminal y poseedor conexiones políticas que llegan a nivel presidencial. La naturalidad y frescura con la que Chance ve la vida terminan conquistando al enfermo y a su esposa.
Los rasgos que representan a Chancey
Por su singular condición, sus palabras siempre son literales y relacionadas con el cuidado del jardín, aunque quien lo escuche lo toma como metáforas de sabiduría para hablar de temas políticos o económicos.
El millonario se apoya en las largas charlas que mantiene con Gardiner. A tal punto confía en él, que lo termina presentando al presidente del país, Bobby (Jack Warden). En su diálogo con el mandatario, que buscaba consejos del millonario por la difícil situación financiera que atravesaba el país, Chance le habla sobre las estaciones de la naturaleza y la importancia en su crecimiento.
Al día siguiente, el primer mandatario cita un pasaje de la conversación que mantuvo con el jardinero, en un discurso presidencial. A partir de ese momento se arma un revuelo de magnitudes impredecibles, al punto de movilizar todo el aparato de la seguridad nacional. El gobierno, incluyendo la inteligencia militar, deciden investigar quién es el famoso Chance Gardiner que el presidente había nombrado en su oratoria política.
Con el paso de los días, la influencia de Gardiner se extiende por todo el ámbito político, al grado de que los funcionarios del partido especulan sobre una posible candidatura presidencial, gracias a la buena imagen que tiene. Sin embargo, a pesar de los exhaustivos esfuerzos del presidente, sus agentes secretos y la prensa por descubrir su identidad, no se encuentra absolutamente ningún rastro que revele quién es en realidad.
Estas circunstancias dan lugar a especulaciones y conjeturas, alimentando la creencia de que Chance podría ser un agente secreto. Todo esto lo lleva a convertirse en una persona famosa, sin saberlo.
El amor y Chance
La esposa del millonario termina sintiéndose atraída hacia el protagonista; sin embargo, para el jardinero, no era relevante experimentar el amor romántico hacia una mujer.
Su forma de aprender e imitar se limitaba a lo su atención capturaba en la televisión: como un apretón de manos, una pose de yoga o un beso en la boca. No registraba estas acciones como expresiones de amor romántico, simplemente las copiaba sin comprender su significado emocional.
La metáfora del control remoto y el mundo real
Una de las escenas más emblemáticas del personaje central y su relación con la televisión -su único vínculo con el mundo exterior- es cuando en una ocasión, se encuentra con un grupo de jóvenes abusivos y, en un momento de tensión callejera, uno de ellos saca un cuchillo. Chance responde, automaticamente, sacando un control remoto. Este hecho, ¡es una tremenda metáfora! Cambiar de canal para alejarse de situaciones que no le agradan, tal como lo hacía con el televisor.
Ahora bien, continuando con la película, tengo una teoría de por qué Chance, a pesar de no poseer ningún registro identificatorio; no obstante, era un personaje notablemente elegante, con acceso al vestuario exclusivo del viejo y a otras partes de la casa, incluyendo una cuidadora que veló por él toda su vida.
A la muerte del viejo, en la casa, Chance se presentó ante los agentes inmobiliarios como el jardinero. Les mostró su habitación y todo su mundo. Estos detalles me llevan a pensar que podría ser hijo del viejo, aunque nunca haya sido registrado debido a su condición especial.
En la época del libro y la película no se hablaba del autismo como una condición, sino que era considerado un problema mental, por lo que, a quienes podían llegar a padecerla, se los escondía.
Esta teoría es pura especulación, pero cierra el contexto.
Este es uno de los film que brinda paz. La ingenuidad, naturalidad y la forma literal de percibir el mundo que tiene Chance, junto con su "estar allí", transmiten una sensación de armonía y fluidez, aunque parezca que algo se va de control, todo fluye. De hecho, el título original en inglés es "Being There".
Es un film muy metafórico. En una época donde las sociedades actuales se caracterizan por relaciones complejas, complicadas, retorcidas, intolerantes y urgentes, esta película se presenta como una necesidad para comprender mejor la vida. A través de su historia, nos invita a reflexionar sobre la simplicidad, la pureza y la serenidad que a menudo se pierden en medio del caos y la exigencia social.
Cuando la apariencia define la realidad: análisis
EL film pone en evidencia cómo los medios de comunicación tienen una influencia poderosa en la comunidad. La narrativa sigue a Chance, un hombre ingenuo que tiene una visión muy limitada del mundo, pero por una serie de circunstancias, se encuentra en medio de la hight society y se convierte en una figura influyente, incluso, como asesor presidencial.
La interpretación errónea de un hombre sabio y profundo debido a su lenguaje simple y su comportamiento tranquilo, nos muestra cómo la sociedad y los medios pueden malinterpretar, idealizar y elevar a personas sin un motivo aparente, basándose en una imagen superficial o en la falta de comprensión.
El poder de la apariencia se presenta como tema central de la película. La imagen y la comunicación pueden influir en nuestras percepciones y crear una figura icónica sin una base real.
Para darle fuerza al símbolo de crear realidad a partir de la apariencias, el film concluye con la ceremonia del funeral del viejo millonario y, mientras el presidente pronuncia el panegírico en su honor, Chance Gardiner se dirige a atravesar un lago en dirección a la naturaleza que se vislumbra en la distancia, sin hundirse en sus aguas.
Festivales y premios
El film fue premiado en el Cannes Film Festival (1980), Berlin International Film Festival (1999), Academy Awards: nominada: Mejor actor protagónico. Ganadora: mejor actor de reparto (1980), Globo de Oro: Ganadora: mejor actor y mejor actor de reparto (1980).